Walking free

Para quien no lo sepa la semana pasada celebramos nueve años juntos (y revueltos) y decidimos aprovechar el evento cultural del año en Duala para organizar una escapadita de fin de semana. 

Así el viernes fuimos a primera hora a la capital económica de Camerún para la inauguración de la exposición de Gaspar Gomán en Doual'art. Seguimos apoyando al pintor en su tournée por Camerún y disfrutamos del ambiente cultural y artístico de Duala. Este día también sirvió para conocer algo más la ciudad y quitarnos de la cabeza las malas experiencias de otras visitas. Unos paseos por el céntrico barrio de Akwa -¡¡con visita incluida a Mango!!- y una agradable tarde en el Foyer du Marin (recomendable alojamiento, con jardín y piscina) nos ayudaron a reconciliarnos con Duala.

Si bien, lo mejor del fin de semana estaba por llegar. El sábado por la mañana y tras un pequeño atasco en el puente sobre el río Wouri llegamos a Buea, ciudad anglófona situada en la base del Monte Camerún (4.095 m), la montaña más alta de África Central. Aunque durante todo el sábado fue imposible ver la cima, el buen ambiente de Buea Town y su mercado nos permitió disfrutar de la tarde. 

Pero la sorpresa llegó el domingo, ya que todas las nubes habían desaparecido y permitían ver por completo el monte. Impresiona de veras y aunque no entraba en nuestros planes ascenderlo, puede que en un futuro nos lo planteemos. Si algún montañero se atreve, aquí lo esperamos.

Sábado: sólo conseguimos ver su silueta

Domingo: monte Camerún en todo su esplendor

 El domingo aprovechamos también para ver otro atractivo de Buea, las plantanciones de té (denominadas por Joan Riera como "jardín versallesco"). Otro destino marcado en el mapa de Camerún, ya quedan menos.